Pausa activa: Los ejercicios que podés hacer en el trabajo y sus beneficios

Combatí los dolores musculares, el sedentarismo y el mal humor con unos leves movimientos en el día a día.

Combatí los dolores musculares, el sedentarismo y el mal humor con unos leves movimientos en el día a día.

Cuando estamos sentados por mucho tiempo en el trabajo, nuestro cuerpo se tensiona y sentimos dolores.

Para combatir estas molestias y al sedentarismo, nació la pausa activa.

El Lic. Eduardo Enciso, jefe de la Unidad de Actividad Física del Ministerio de Salud, explicó que la pausa activa es una iniciativa como gimnasia laboral para los que realizan trabajo que requiera estar sentados por mucho tiempo.

Cada una hora, recomienda hacer algunos ejercicios durante 3 a 5 minutos.

“Desde el Ministerio de Salud promovemos la pausa activa porque tiene muchos beneficios. Ayuda a prevenir el sedentarismo que, a la vez, produce obesidad, diabetes y otras enfermedades”, explicó el especialista.

Ejercicios

En conversación con Día a Día, recomendó 5 tipos de ejercicios para la pausa activa.

1-Levantarse de la silla y trabajar parados por unos minutos.

2-Si recibo una llamada, caminar mientras hablo.

3-Si en la oficina se cuenta con escalera, recomienda subir y bajar.

4-Ponerse de pie, con la espalda recta y con los dedos entrelazados, extender los brazos hacia arriba.

5-Levantar y bajar las piernas.

6-Coloca tus manos sobre los hombros y realizar movimientos como dibujando círculos grandes de forma lenta hacia adelante y atrás.

Beneficios

Activa el metabolismo y mejora la circulación sanguínea.

Beneficio psicológico: cambia el humor porque se activan las endorfinas, lo que ayuda que la actividad laboral sea más placentera.

Ayuda a prevenir contractura muscular, que se suele generar en la espalda y el cuello por estar sentados por mucho tiempo.

Ayuda a que el cuerpo se mueva.

Hacer pausas activas puede mejorar la concentración y la productividad, porque activa el flujo de sangre al cerebro.

¿Quiénes pueden realizar la pausa activa?

Pueden realizarla todas las personas que trabajan en oficinas, de todas las edades y todas las condiciones, ya que la exigencia física que demanda la realización de estas sesiones activas es de baja intensidad, no sofocantes, fáciles y adaptables a las dificultades que pudieran surgir.

Si la persona sufre obesidad mórbida y no puede realizar ciertos movimientos, recomienda acudir a los consultorios especializados en tratar la obesidad.

Se puede aprovechar la pausa activa para motivar a los otros compañeros a adoptar la misma rutina.

Cuidado completo

Para que el cuidado del cuerpo sea completo, Enciso recomienda acompañar la pausa activa llevando en la oficina 3 porciones frutas diferentes para la media mañana o merienda.

Instó a tomar 8 vasos de agua al día y acompañar el almuerzo con ensalada de verduras de diferentes colores.

“Es importante evitar las bebidas azucaradas y gaseosas”, señaló.

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