Profesionales de 15 países se capacitaron anteayer en un congreso realizado en Brasil.
Por José Amilcar Oviedo
La temática es parecida en la mayoría de los casos. El cliente llega a la barbería, se sienta y, sin que le pregunten nada, cuenta su historia y sus problemas.
“Cuando cambia su humor y la manera de entrar a la peluquería, uno nota que el cliente está medio cabizbajo, medio en depresión”, relató Abel Martínez, un barbero de San Lorenzo.
Él fue uno de los que capacitaron a cerca de 240 barberos de 15 países en la primera edición del Barber’s Secret Convention en Campo Grande (MS), Brasil.
“Son cuatro puntos que los barberos aprendimos: identificar, escuchar, ver y encaminar”, relató a DÍA A DÍA.
Remarcó que muchos se desahogan con sus peluqueros y barberos. Ellos les pueden encaminar la ayuda sin reemplazar el trabajo de un psicólogo.
Martínez valoró la capacidad de respuesta de las instituciones de Brasil para los casos de depresión e intentos de suicidio.
“Te cubren los gastos por el tiempo que no trabajás en ese estado de depresión en el que estás. Eso fue lo que más me llamó la atención”, dijo.
Manifestó la importancia de escuchar, “hay que hacer preguntas, indagar”, dijo.
“El trabajo del barbero ya no es solo ganarse la vida, sino salvar vidas”, dijeron también en el encuentro.
“Podemos ayudarles para que busquen ayuda porque estas enfermedades necesitan tratamiento”, afirmó por su parte el colombiano Andrés Mejía.
Él tiene su local en Ponta Porã, en la frontera con Pedro Juan Caballero. “No solo es cortar cabello o barba, sino también atender psicológicamente”, indicó.
Su esposa, Anynha Mejía, es una de las organizadoras del evento, que, incluso, recibió a barberos europeos.
“La sociedad piensa que el hombre no puede enfermarse, ser débil y toca al barbero identificar eso. (…) Los hombres también pueden sufrir”, comentó.
Recordó que la idea inició el año pasado cuando muchos barberos cayeron en la depresión porque perdieron familiares por covid.
“Eso fue una segunda pandemia, pero mental”, remarcó.
Leé más: Implante capilar: El pelo colocado ya no se vuelve a caer, explican