Es portátil y se carga por USB. Samsung y otras marcas están ofreciendo esta opción.
Los cinéfilos y los seriéfilos pueden acceder a sus contendidos desde una plataforma más grande que las pantallas de sus teléfonos. Se trata de miniproyectores portátiles que son cada vez más populares.
Samsung, por ejemplo, tiene su The Freestyle, la primera en esta tecnología. Según la descripción de la marca está “dirigido a la Generación Z (nacidos entre 1995-2000) y millenials (nacidos entre 1981 y 1997)”, ya que son los que buscan llevar el contenido de audio y video dondequiera que van.
El Freestyle puede proyectar pantallas desde 30 pulgadas hasta unas increíbles 100 pulgadas ¡Es como tener tu propio cine en casa!
Tiene funciones de Smart TV disponibles o transmite contenido directamente desde tu smartphone, compatible con dispositivos Android e iOs, si se vincula con una aplicación llamada SmartThings. El precio de este artefacto ronda los G. 7 millones.
Otra opción
Hay un aparato muy parecido: el miniproyector LCD CMR-P200, pero con una tecnología para las generaciones que todavía utilizan el pendrive.
Es de la marca Consumer y cuenta con un sistema de parlante incorporado, pero también se le puede añadir unos auxiliares. Es de tamaño pequeño y puede proyectar hasta 130 pulgadas.
Si se tiene una película en una notebook, basta conectar el cable USB entre ambos para poder mirar el contenido a mayor escala. Su alcance es de hasta un metro y medio.
Este aparato tiene un costo de G. 874.000 y G. 940.000, dependiendo de la casa comercial.
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