Solo parándonos cada media hora también hacemos la diferencia en vez de estar sentados.
Por José Oviedo Bareiro
La tradición reza que caminar después de comer ayuda en la digestión. Pero un estudio descubrió que además reduce el azúcar en la sangre.
Son suficientes entre 2 a 5 minutos de caminata, según una publicación de la revista Sports Medicine.
Los científicos compararon lo que es quedarse sentados, de pie, o hacer caminatas leves y encontraron diferencias.
“Los descansos intermitentes de pie a lo largo del día y después de las comidas redujeron la glucosa en promedio en un 9,5 % en comparación con estar sentados”, dijo Aidan Buffey, de la Universidad de Limerick en Irlanda en entrevista a la CNN.
El profesional, coautor del estudio afirmó que si uno camina intermitentemente con poca intensidad a lo largo del día, la reducción de la glucosa es del 17 %.
Descansar estando de pie también es bueno aunque no tanto como movernos de un lugar a otro.
Cómo caminar reduce el azúcar
Los científicos explicaron que los músculos necesitan de glucosa para funcionar, entonces el movimiento ayuda a eliminar los azúcares del torrente sanguíneo.
Por eso, muchos corredores consumen altas cantidades de carbohidratos antes de una maratón o una carrera.
El análisis publicado en febrero del 2022, combinó los resultados de siete estudios que comparaban el efecto de sentarse, pararse y caminar.
Practicar la pausa activa
Al respecto, el Dr. Federico Fariña, médico diabetólogo, hizo hincapié en la pausa activa para los que trabajan durante largas jornadas diarias.
“Cada 30 minutos, hay que caminar por lo menos dos minutos o levantarse a hacer movimientos de estiramiento, de flexibilidad”, dijo.
También recordó que caminar al menos 500 pasos al día genera beneficios a nivel cardiovascular. Esa cantidad luego hay que ir aumentando, apuntó.
Señaló que caminar después de comer mejora los niveles de glucosa (azúcar) así como los niveles lipídicos (grasas) y ayuda también a la digestión.
“No pueden pasar 30 minutos sin que nos estemos moviendo. Eso mejora la circulación, a nivel arterial, el estrés, un montón de beneficios”, resaltó.
De acuerdo a la encuesta de factores de riesgo de enfermedades no transmisibles, en el 2011 la prevalencia de diabetes era del 9,7 % entre la población de 18 a 65 años.
Eso subió en la segunda encuesta de este año al 10,6 %, principalmente por el exceso de peso. Casi el 70 % de los paraguayos tiene sobrepeso u obesidad, destacó el galeno.
“Lo fundamental es fomentar el estilo de vida saludable”, comentó. Instó a mantener una dieta balanceada y que cada comida del día se componga de fibras, carbohidratos y proteínas.
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