Desde noviembre comenzará a operar en zonas de Recoleta, Villa Morra y Aviadores.
Por José Amilcar Oviedo
Para aquellos que quieren salir, pero saben que no tienen dónde estacionar, llega Mobi, una app que alquila monopatines, bicicletas y motos eléctricas.
En noviembre hará sus primeros viajes en el país, dijo Eduardo Viveros, country mánager en Paraguay.
“Va a estar en la zona de Villa Morra, barrio Recoleta, también la zona de Shopping del Sol, Paseo La Galería, Aviadores del Chaco”, indicó.
Esta iniciativa ya lleva un año y medio desde que comenzó a operar en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia. Ahora se expande a Paraguay y Chile.
Comenzarán con 60 monopatines, 20 bicicletas eléctricas y 10 motocicletas eléctricas en Asunción.
“Cada uno tiene un precio diferente, estimamos que estaría G. 2.500 a G. 2.800 activar, encender el vehículo”, indicó.
A partir de ahí, se abonará entre G. 200 a G. 280 el minuto, en el caso del monopatín y la bicicleta.
Cabe señalar que solamente se podrá transitar dentro de las áreas señaladas. El motor se apaga si se cruzan los límites. “Cuentan con un seguro para el usuario, nuestra flota y un tercero”, comentó.
Hoteles aliados
Mobi tiene convenios con comercios y hoteles que tendrán una flota frente a su local. “Salen de su trabajo, abren la aplicación y ahí van a ver qué vehículo está más cerca para su uso”, explicó Viveros.
El usuario se acerca y escanea el código QR del vehículo desde la aplicación y sigue los pasos.
Tendrán varios métodos de pago, las tradicionales tarjetas de débito y crédito, así como el “Mobi Cash”, que se recarga.
Habrá un equipo de monitoreo de flota. Todos los vehículos estarán rastreados por GPS.
“Si alguien mueve un vehículo sin activarlo, a nosotros nos suena una alarma y ahí inmediatamente tenemos un centinela que va a estar recorriendo”, dijo.
Este centinela también tendrá la función de reubicar los aparatos y asistir en caso de necesidad.
Foto al terminar
Para terminar el viaje, el usuario tiene que sacar una foto del vehículo y los funcionarios tienen que verificar que esté bien estacionado.
“Queremos que no deje obstaculizando ninguna salida de vehículo, ningún paso peatonal”, aclaró.
Termina el viaje y otra persona puede llegar y usar el vehículo. El concepto es “Ride-sharing”.
La aplicación se descargó más de 30.000 veces en Bolivia y hay 9.000 usuarios.
Observó que al inicio hubo rechazo de las empresas del transporte público de pasajeros, pero luego se dieron cuenta de que se complementan.
Los usuarios se bajan de los colectivos y prosiguen su trayecto en los monopatines o usan para llegar a las paradas, aseguró.