¿Qué es la onicofagia? Causas y solución a comerse las uñas

Identificar el disparador de pensamientos que llevan a la acción es clave, explica una profesional.

Identificar el disparador de pensamientos que llevan a la acción es clave, explica una profesional.

Por Tania Sosa

La onicofagia o comerse las uñas es uno de los hábitos más extendidos, y nada positivo para nuestra salud en general.

Las causas pueden variar, según la psicóloga clínica Silvia Meza. Desde imitación, ya que desde niños se tiene de referencia a alguna persona que también lo hace, normalmente del entorno familiar que lo padezca, o por alguna situación detonante.

“Lo primero que hay que hacer es identificar el pensamiento que lleva a realizar esta conducta. Algún evento traumático que eleva la ansiedad, que no se puede controlar”, expresó.

Otras de las causas pueden ser la baja autoestima o la timidez. Cuando una persona es introvertida, un mecanismos para liberar cierta tensión es morderse las uñas.

En las personas con este comportamiento, se siente cierto alivio al comerse las uñas. “Muchas veces no se dan cuenta y hasta se hacen daño porque se comen hasta sangrar”, explicó la profesional.

Tratamiento

¿Existe tratamiento para controlar este impulso?

1. “Sí. Lo primero que debemos hacer es saber qué nos pone en esa situación. Hablar con el jefe, expresarse en público”, indicó.

2. En el mercado local existen esmaltes de uñas que tienen sabor amargo. Así también, algunas personas optan por realizarse manicura o uñas acrílicas.

“Acá hay que tener cuidado de volcar el impulso en otra cosa. Porque si seguimos teniendo el mismo pensamiento, se va a buscar otra manera de aliviar esa tensión”, mencionó.

3. Técnicas de respiración y mindfulness pueden ayudar a canalizar de otra manera esta experiencia.

4. La terapia es fundamental para que el tratamiento sea efectivo y poder resolver el trauma.

5. Apoyo de la familia y de los amigos. “No reprender o castigar. Hablar con amabilidad y empatía ayuda mucho a un paciente, ya que es algo que no puede controlar”, indicó Meza.

6. La actividad física fomenta las buenas prácticas. “Es fundamental realizar actividades físicas y de esparcimiento al aire libre. Nos mantiene alejados de los pensamientos negativos que podamos tener sobre algo”, finalizó.

Las posibles consecuencias

  • Lesiones físicas: la mayoría que padece onicofagia no se da cuentan de su comportamiento hasta que siente dolor. En muchas ocasiones, este hábito genera mal crecimiento y deterioro, tanto de las uñas como de los dedos, por lesiones en la piel.
  • Problemas laborales: las personas pueden ser juzgadas por este trastorno.
  • Caries y halitosis: las bacterias que se esconden debajo de la uña pueden llegar a la boca y, por tanto, aumenta el riesgo de caries.
  • Alteraciones en la mandíbula: puede afectar a los huesos y músculos que unen el cráneo con la mandíbula inferior.