Los mejores alimentos «humanos» para tu perro

Ellos también pueden llevar una dieta saludable al mismo tiempo que tú.

Ellos también pueden llevar una dieta saludable al mismo tiempo que tú.

Por William Girett

Es bueno saber qué comida humana puede comer tu perro, porque ya estás comiendo algo muy rico y tu perro te está haciendo “ojitos” para que le des a probar. Entre los mejores alimentos que sí puedes dar a tu perro se encuentran el hígado (pollo o vacuno), el pescado, el arroz y la carne de pollo.

HÍGADO

El hígado es rico en vitaminas y buena fuente de proteínas. Al no contener azúcar es bueno para perros con diabetes. Combate la anemia por su contenido en hierro y es bueno para los cachorros. Se le debe dar de forma moderada, siendo un complemente de su alimentación.
Mejora su pelaje.

FRUTAS

Los perros también pueden comer frutas (pera, manzana, melón, sandía, frutilla) le aportan multitud de nutrientes y vitaminas beneficiosas para su salud, sin embargo, es muy importante cuidar de las cantidades. Es mejor darles a modo de premio, siempre se debe quitar las semillas y el corazón de la fruta y en algunos casos las cáscaras.

AVENA

La avena integral (excelente fuente de energía y proteínas, es muy bueno para el corazón), es bueno si se prepara en una taza, agregarle una zanahoria rayada, un huevo y batir con una cuchara todos los ingredientes. Llevar la mezcla al horno entre un minuto y un minuto 40, y ya está.

MOLLEJAS DE POLLO

Las mollejas, así como los hígados y los corazones de pollo crudos, que contienen muchos nutrientes esenciales, son un gran complemento en la dieta habitual para tu perro.

EL ARROZ

Por su versatilidad, el arroz es un ingrediente habitual en muchos platos. Prepararle a tu mascota un arroz con pollo es una idea muy saludable. Hervir el arroz en un chorro de agua con aceite de oliva, sacarlo, y luego acompañarla con filetes de pollo a la plancha, le va encantar. No abusar con la cantidad el arroz porque se puede estreñir.

PESCADO

El pescado es una fuente saludable de proteínas. Cocinarlos suavemente, sacarle los huesos y no exagerar con los condimentos, puede convertirse en un plato especial. Los peluditos se suelen aburrir de comer balanceados, entonces podés hacerle un menú especial e intercalarlos.