El famoso modisto no tuvo hijos y sus sobrinos nietos se pelean por el imperio que dejó.
El modisto Pierre Cardin construyó un sólido imperio durante su larga carrera, hasta que falleció a finales del 2020, a los 98 años, dejando a sus sobrinos su legado, ya que no tenía hijos.
Nacido en Italia con el nombre de Pietro Costante Cardin, con apenas 23 años se trasladó a París, donde se consolidó en la alta costura francesa.
Casi tres años después de su muerte, las sobrinas nietas del creador, en torno a las cuales está unida la mayor parte de la familia Cardin, quienes desean que el grupo sea vendido y denuncian «una tentativa de robo de herencia».
Y del otro lado está el sobrino nieto del modisto, Rodrigo Basilicati-Cardin, convertido en director general del grupo en 2018 y después en presidente en 2020.
Este cincuentón, que dice haber trabajado cerca de 25 años al lado de su tío abuelo, quiere «respetar la voluntad de Pierre Cardin, preservar su imperio y defender su imagen».
Imperio
El modisto dejó un gran patrimonio: un holding y sus filiales, licencias, marcas, y bienes inmobiliarios en París y el sur de Francia.
Los activos del grupo están estimados entre 750 y 800 millones de euros, según el abogado de las sobrinas nietas.
Estas acusan a su primo de querer «recuperar todo el patrimonio individual de Pierre Cardin y del grupo con maniobras dudosas y eventualmente fraudulentas», indica el abogado.
También alegan que Rodrigo Basilicati-Cardin presentó un documento de dudosa credibilidad, donde supuestamente Pierre Cardin le dejó toda su herencia.
La Fiscalía de París abrió una investigación en marzo tras una queja presentada por las sobrinas nietas Cardin por abuso de debilidad, abuso de confianza agravada y estafa.
