Casi niñas: jugando un mundial con solo 16 años

Dos adolescentes viven su sueño en un certamen plagado de figuras veteranas

Dos adolescentes viven su sueño en un certamen plagado de figuras veteranas

Por William Girett

El Mundial Femenino 2023, que se juega en Nueva Zelanda y Australia, lleva ya su segunda semana en proceso y con partidos que ayer lunes tuvieron mucha trascendencia, especialmente por tratarse del debut de Argentina y Brasil.

La Albiceleste arrancó con el pie izquierdo al caer 1 a 0 ante Italia. A su vez, las brasileras lograron una contundente victoria de 4 a 0 sobre Panamá.

Y, mientras este evento deportivo cuenta con la presencia de importantes futbolistas veteranas como las españolas Irene Paredes (32 años) y Jenni Hermoso (33), la estadounidense Alex Morgan (34), la canadiense Christine Sinclair (40) y la nigeriana Onome Ebi (40), también están las adolescentes que cumplen su sueño de jugar su primer Mundial.

Giulia Dragoni (Italia). Con 16 años, se convirtió ayer en la jugadora más joven en lucir la camiseta de Italia en un Mundial desde 1978. Debutó con el Inter de su país con solo 14 años, fue transferida al Barcelona de España y hoy es una de las más prometedoras figuras del equipo azul.

Casey Phair (Corea del Sur) cumplió 16 el 29 de junio y es oficialmente la jugadora más joven de la historia de la Copa Mundial Femenina de la FIFA. Tiene 1,78 metros de estatura y una musculatura nada habitual para su edad.

EDAD MÍNIMA

Según los requisitos de la FIFA, para el Mundial Femenino, todas las jugadoras de las selecciones deberán tener como mínimo 16 años al final del año natural en el que se disputa la competición, es decir, todas deberán haber nacido el 31 de diciembre de 2001 o antes de esa fecha.